Pues, fíjense, que a mí me parece que este es el momento de conocer su obra, indagar en la época en la que vivió y trabajó y extraer lecciones para la mejor comprensión de su obra y su vida. Una vez liberado Alberto Sánchez y su obra del oscuro estado en el que se encontraba, es hora de entender esa obra, disfrutar la poética de su escultura y la sutileza de sus dibujos. ¿Por qué se habla más del sitio que de la obra? ¿Alguien tiene problemas con su obra o su trayectoria artística o vital? Hablar de otras cosas y no de su obra recuperada es algo así como ningunear al autor, ignorar sus esculturas, despreciar sus dibujos. Toledo históricamente ha tenido dificultades con el arte contemporáneo. El más reciente y dramático, el desprecio durante años a la escultura de Chillida que le obligó a repudiarla. Aunque ya había ocurrido algo similar años atrás con el Greco o con el Trasparente de la Catedral. Continuar leyendo
José Ramón de la Cal
Alberto Sánchez, la dignidad de la pobreza [Jesús Fuentes Lázaro]

Se suele decir que los principios y valores de lo que seremos en la edad adulta se fijan en el cerebro en los primeros años de la infancia. Sea cierto o sea falso, a partir de ahí, todo son variaciones, interpretaciones, vueltas y más vueltas sobre los mismos temas y los mismos asuntos. Alberto Sánchez nació y vivió en la pobreza, cercana a la miseria. Sintió la pobreza como una fuente de imaginación y creatividad. Nada que ver con los llamados artistas del hambre que proliferaron en los siglos XIX y XX que anunciaban como forma de arte una presencia despojada de todo, hasta del alimento. Las estrecheces económicas de los años de la infancia reaparecerán de diversas maneras en la vida adulta de Alberto hasta constituir una austeridad interior que condicionará su vida y su obra artística. Si no fue un escultor y pintor de más renombre se debió a esa austeridad que mantuvo durante toda su vida. No ambicionaba el dinero, no ambicionaba la fama, ahorraba en materiales y prefería la vida sencilla, casi primaria, a las complicaciones de la fama. Aunque de no haber nacido pobre no hubiera hecho la obra que hizo. Para pintar o esculpir le bastaba la imaginación que se había despertado en él desde pequeño, producto de las carencias. Su obra fue su forma de dignificar la pobreza de su vida y de la época. Resultó el antídoto que empleó en sí mismo para no vivir del rencor, no convertirse un artista permanentemente agraviado o combatir el narcisismo que se manifestaba en muchos personajes que conocía. Era el antidivo que terminaba ocupando el centro de las reuniones. Continuar leyendo
De la ciudad a la célula. Universidad Laboral de Toledo (1971-1977) [paz+moya+cal]

La diseminación y enraizamiento de la arquitectura moderna en España fue significativamente dispar en su desarrollo temporal -con una marcada ruptura entre dos generaciones- y su geografía, caracterizada desde hace siglos, por la desigual densidad de población en su territorio. Si las particulares circunstancias políticas y económicas de la nación supusieron un serio obstáculo para la expansión de las ideas de la modernidad, la condición periférica de las poblaciones de provincias dificultó aún más esta difusión. Es el caso particular de la ciudad de Toledo, que a mediados del siglo XX había tenido un escaso desarrollo fuera de la ciudad histórica, y cuyas instituciones permanecían fuertemente ancladas al historicismo y los lenguajes que le eran propios. La arquitectura moderna fructificó en estos territorios en contados ejemplos que hoy podemos considerar rara avis, unas piezas que tienen el valor de lo insólito y de ser portadoras de unas ideas de renovación que encontraron su particular acomodo en lugares ignotos. Continuar leyendo
La Casa Magariños, 1977. Una casa es una casa [josé ramón g. cal, josefa blanco paz]
Hay en esta obra del arquitecto Manuel de las Casas una declaración de principios, un tema de reflexión para este tiempo de incertidumbres, convertir lo ordinario, lo cotidiano, en extraordinario; convertir lo más íntimo y singular en cercano, y con el uso de la materia y las herramientas más elementales alcanzar metas técnicas nuevas. Asuntos que hoy la arquitectura demanda, retomar el camino de lo normal. Continuar leyendo
Ingeniar ciudad [Josefa Blanco Paz, José Ramón G. Cal]

El último ingenio urbano de la ciudad, la escalera de Galiana o del Granadal, se abrió un lunes 8 de septiembre de 2014. Las de Recaredo lo habían hecho un martes 20 de junio del 2000. Una inflexión en el tiempo y en la forma de la ciudad donde unos mecanismos en la fachada norte; primero en su oeste, Recaredo y después en su este, Galiana; reestructuraban el orden de las puertas de la ciudad amurallada, resignificaban su función con una mirada contemporánea. Son puertas como en otro tiempo lo fueron los baluartes de la Regia Sedes Toletana [1], la ianua muri y la ianua urbis – la puerta de la fortaleza y la puerta de la ciudad- que nombra y representa con precisión la miniatura del Códice Albeldense del s. X, donde asoman y se “selfían“ nueve toledanos orgullosos. Continuar leyendo
El anfiteatro de Toledo ¿ruina o arquitectura? [José Ramón de la Cal]
La ruina: la pérdida de la fortuna, la decadencia moral, el deterioro físico, la destrucción de lo construido, siempre es una fatalidad. Al contrario, el monumento significa la fortuna y la belleza de las obras humanas. La ruina es construcción muerta, el monumento es arquitectura viva. También la ruina inútil puede transmitir belleza con su gran poder evocador gracias a la resiliencia humana y su voluntad reparadora y constructora, capaz de reconstruir una y otra vez lo erosionado por el tiempo, aunque solo sea una reparación imaginada. Continuar leyendo
Orden natural, desurbanizar como progreso [José Ramón Cal]

Tan solo el 2% del suelo de la Tierra son ciudades. De los dos millones de habitantes (2.121.888 hb) que residen en Castilla-La Mancha, la mitad (901.946 hb) vive en poblaciones de menos de 10.000 hb. En términos absolutos los núcleos urbanos densos hoy ya superan en población a los núcleos rurales. Nuestra comunidad es tan grande y extensa como el Benelux (Bélgica, Países Bajos -Holanda- y Luxemburgo juntas). Continuar leyendo
Senda de las moreras, un camino nuevo en la ciudad vieja [José Ramón de la Cal]

10×10=100. Toledo en cien años [José Ramón de la Cal & Josefa Blanco Paz]

Dentro de cien años, Toledo se habrá transformado. Sólo se conservan las ciudades que se transforman. Aún así, seguirá pareciendo imperturbable, aparentemente inerte como en los últimos cinco siglos. Es lo que tienen las ciudades que la historia y el tiempo han hecho bellas, que parecieran haber estado así y ahí desde siempre. Continuar leyendo
La Tourette [Paz+Cal]

Service dáccueil Couvent Le Corbusier
Intentamos entender Ronchamp sin tener ocasión de oír una misa allí. Pero, inesperadamente, en la Tourette era posible no solo una visita, sino una jornada completa de estancia con alojamiento en una de las celdas, con posibilidad de recorrer las estancias del convento que la orden permite y de compartir rezo y austera mesa con los monjes que lo habitan. Localizado el destino sobre el mapa, L’Arbresle a 25 km al noroeste de Lyon, en la confluencia de los ríos Brévenne y Turdine, el resto del camino hasta el convento preveíamos estuviera claramente señalizado. (La impaciencia por llegar se anteponía al espíritu de la orden que condicionó su implantación y recorrido de llegada). Continuar leyendo
Tavera, el enigma de las tejas negras: luto y cera [José Ramón de la Cal]

La arquitectura es la memoria de la historia, un retrato vivo en el tiempo que aún sin pretenderlo se graba de forma indeleble con los hechos culturales, sociales y políticos de cada momento, es reveladora, acumula significados. La arquitectura en términos lingüísticos es equilibrio entre significante y significado, entre la materia transformada y su capacidad para evocar en la mente humana. Si digo la palabra “sal” por un lado va el signo s-a-l y por otro el pensamiento y sensaciones inmediatas que mi mente le ha asociado. Si combino varios signos, palabras, como el verso de Roberto Sosa: “la sal dulce de la palabra poesía”, el asunto se complica. La palabra es a la literatura como la materia a la arquitectura. La arquitectura es un equilibrio entre lo técnico y lo emocional, propio solo de la especie humana y su continua necesidad de habitar y representarse. Continuar leyendo
Vega Baja I, diagnóstico, once años de… reflexión [José Ramón de la Cal]
En la Vega Baja de Toledo hay un circo romano del siglo primero. A su espalda está el colegio Carlos III, por encima, atravesando la calle del mismo nombre, encaramada, la Venta de Aires; allí asoma el arco central del circo conviviendo con contenedores de basura y un centro de transformación, más abajo está la ermita del Cristo de la Vega, los restos de un camping abandonado, también el río Tajo, ahí al lado, oculto, pareciera esconderse de la vergüenza de ir sucio y desnudo de agua, una senda que lo recorre; la Fábrica de Armas, hoy campus universitario, un puente que cruza al parque de los Polvorines, los viveros forestales, un conjunto de viviendas con una clínica, San Pedro el Verde aislado en una península, el Poblado Obrero, la plaza de la Calera y una escuela de amplios porches; a oeste, la traseras del barrio de Santa Teresa, una iglesia de hormigón, aparcamientos tiznaos de negro que disuaden, el colegio de las Carmelitas sobre los restos de un teatro romano y terminada la vista de 360,º el Campo Escolar con sus pinos carrascos centenarios. Todos estos elementos rodean un espacio vacío que custodia en su suelo un suburbium, parte de la explicación a esa etapa oscura de la historia de la ciudad, el alto medievo, donde la cultura clásica fue reemplazada por la imposición y pugna de las dos grandes religiones monoteístas que acabarían dando forma a la ciudad. Continuar leyendo