Este artículo es un relato de una experiencia personal y la comparto como advertencia a otros iguales…
Me sentía afortunada de encontrar un trabajo en esta situación tan mala, y tan complicada para el sector de la construcción. Me encuentro escribiendo esto por un motivo muy triste. Empieza así:
Tuve una entrevista en una promotora situada en El Álamo.
Les habían gustado algunos diseños que hice en la carrera, y decían que era lo que buscaban para sus nuevos chalets. Me ofertaba trabajar por la mañana y cobrar mil euros, encargarme del diseño y visitas de obra, con contrato indefinido.
El primer día, me dejan en mi ‘puesto’ y que me organice. Me quedé un poco paralizada porque no esperaba que me dejaran a mi aire con poco más que una parca explicación. Me puse a buscar los planos de proyecto en el archivo del ordenador, porque el ‘jefe’ no sabía dónde estaban.
Encontré una carpeta que muy amablemente había organizado mi predecesor, con el proyecto completo original que databa de hace diez años, varias intervenciones de distintos arquitectos para darle solución a distintos problemas como las instalaciones, ya que las distribuciones de las casas habían sido completamente desvirtuadas del proyecto original, y se necesitaban otros planos. Lo más actualizado que encontré, fueron planta baja y alta de cada casa y una sección idéntica para dos de ellas.
Eso era el proyecto. Sin información de instalaciones ni detalles constructivos, únicamente los planos de las tomas a la red pública. Continuar leyendo