La barra, ese lugar (I). La Ponderosa de Cuenca [Luis Moreno Domínguez]

A mesa puesta

El espacio en arquitectura se ha definido de diversas y enrevesadas formas. Osaré hacer una definición sencilla; el espacio es limitado, así que un espacio se crea con una simple partición, muro o tapia. Una barra de un bar conforma, por tanto, un espacio que incluye el lugar del cliente y el del tabernero. Su ergonomía es importante y sus materiales también. Son los que van a caracterizar ese espacio, y los que van a condicionar que tanto uno como el otro desempeñen lo mejor posible su función. Uno consumiendo y el otro atendiendo. El tabernero no sirve, atiende. Ha de prestar atención a que el cliente esté a gusto. Al fin y al cabo cuanto más confortable esté más tiempo se quedará y más consumirá. En cierto modo el tabernero y el cliente forman parte del espacio creado. Continuar leyendo

Entre el fado y el jondo, se asomó Cuenca [Teodoro Sánchez-Migallón]

Organizado por la Demarcación de Cuenca del Colegio de Arquitectos de Castilla-La Mancha, y coordinado por “Cuenca(in), accesible por naturaleza”, con un gran número de patrocinadores y colaboradores, entre ellos cabe destacar a la Universidad de Castilla-La Mancha, el Ministerio de Fomento, el Ayuntamiento de Cuenca y la Diputación Provincial, este segundo Congreso de Arquitectura, tiene como eje de diálogo, las experiencias desarrolladas en España y Portugal, como país invitado, concretamente entre las ciudades de Toledo, Cuenca, Madrid y Coimbra, teniendo Castilla-La Mancha el protagonismo cuando se habla de paisaje y patrimonio, y en especial Cuenca como pionera del abstracto hispano. Continuar leyendo

La arquitectónica “Vía Mística” de Bill Viola en Cuenca [Antonio Illán Illán]

Fotograma de Madison y Sharon

El neoyorkino Bill Viola es el artista más prestigioso, representativo e importante del mundo en la técnica del videoarte, de la que es el verdadero pionero. Ha creado instalaciones, vídeos, películas, entornos sonoros, proyecciones de vídeo sobre paneles planos y obras para conciertos, óperas y espacios sagrados durante más de cuarenta años. Sus obras tienen ciencia y conciencia, forma de excelsa estética y fondo que roza lo inefable, preciosismo y emociones, innovación formal y concepto atemporal, lo inmanente de temas e iconografía se combina con lo efímero del medio videográfico. Si la poesía mística es aquella que expresa la unión espiritual entre el conjunto de la humanidad y Dios, la obra de Viola participa de esa mística, aunque el concepto de Dios nunca sea visible en ella. Viola es un genio con razón, imaginación y saber, a la vez que un homo spiritualis.Ante las obras de este artista me viene a la mente el silencio o la música. La espiritualidad de la música es lo más cercano a la trascendencia. Tanto me da sentir por dentro o escuchar en unos cascos algo de Johann Sebastian Bach, Lover Man de Charlie Parker, el canto dhrupad -el género más antiguo de la música clásica indostánica-, el reggae de Bob Marley, una rachenitsa balcánica, lo que sea de Claudio Monteverdi, Jimi Hendrix y siempre de Camarón o Meneses. La música y la obra de Viola comparten el doble disfrute de crear y ver/escuchar. No tenemos necesidad de explicar, ni siquiera de atribuir significados, simplemente vemos o escuchamos y disfrutamos.  Continuar leyendo

¡Cuenca SÍ existe! [Lope González Palomeque]

Propuesta remonte Zóbel
La naturaleza de la crisis de la ciudad española no es ajena a la crisis del planeamiento. El declive de los Cascos Históricos en buena parte de los casos ha venido apuntalado por el urbanismo desarrollista y la descentralización de la funcionalidad y Cuenca, como una más, posiblemente vio en el ladrillo y las moles dotacionales la oportunidad de ser más que esa ciudad encantadora y bella, asomada al abismo y hogar de una de las más importantes vanguardias artísticas del SXX. Pero el precio del anhelo, tan humano como desmedido, se cobra a largo plazo. Mientras la ciudad comprueba el despoblamiento de los barrios tradicionales a cambio del precario funcionamiento cívico de las urbanizaciones con piscina y asiste, a estas alturas, a decisiones como el desplazamiento de las pocas funciones del centro hacia las afueras urge- más que nunca- la necesidad de reinventarse. Continuar leyendo