Cerámica en la iglesia [Diego Peris Sánchez]

Detalle del mural de Villalba de Calatrava.

Los proyectos del Instituto Nacional de Colonización eran capaces de integrar actividades artísticas en la arquitectura, especialmente en las iglesias. De modo singular, la presencia de la cerámica se reitera en numerosos proyectos religiosos. Elementos de gran sencillez que conviven con la geometría sencilla de las fachadas.

Mompó en Villalba de Calatrava

Una unión especial del arquitecto José Luis Fernández del Amo y el ceramista Hernández Mompó en Villalba de Calatrava. José Luis Fernández del Amo estudió en la Escuela de Arquitectura de Madrid obteniendo el título en 1942. Ingresa como arquitecto de Regiones Devastadas, desde ahí, y desde el Instituto Nacional de Colonización, desarrolla los proyectos de pueblos de colonización de San Isidro de Albatera (1953, Alicante), Villalba de Calatrava (1955, Ciudad Real), Vegaviana (1956, Cáceres), El Realengo (1957, pedanía de Crevillente, Alicante), Cañada de Agra (1962, pedanía de Hellín, Albacete), La Vereda (1963, pedanía de Peñaflor, Sevilla), Miraelrío (1964, pedanía de Vilches, Jaén).

Y junto a ellos, proyectos de arquitectura religiosa en los que la austeridad es capaz de crear ámbitos de especial intensidad. Proyectos como la iglesia de Nuestra Señora de la Luz (Madrid), la de la Santa Cruz, en Cruz do Incio (Lugo); la de San Antonio de Padua (Lugo); la de Santa Mariña, en Chantada.(Lugo); la de Santa María, en Bayo (La Coruña); y el Centro de Ejercicios Espirituales para las Esclavas del Sagrado Corazón (Madrid). Continuar leyendo