Sucedió en Toledo. 25B D16 Archivo VASIL
“Tenía claro que yo a mi hijo no lo dejaba en el suelo”
Las nuevas tecnologías han hecho posible localizar a nuestros protagonistas de 1971. Manoli Taravilla Martin-Macho y su hijo Oscar Paniagua Taravilla nos han recordado, en vivo y en directo, aquel día en el que Manoli, con 21 años, se acercaba por primera vez a una urna.
Oscar, sin haber cumplido el año, protagonizó una de las escenas electorales de aquella jornada. La madre de Manoli guardó el recorte del periódico durante mucho tiempo; por eso, es una escena entrañable para nuestra protagonista y su hijo.
Hemos quedado con ellos y ambos miran con emoción la fotografía. Manoli se deshace en todo lujo de detalles; mientras, Oscar, solo acierta a comentar que, después de 45 años, continúa teniendo el mismo flequillo.
“Nosotros vivíamos en Santo Tome – relata Manoli- muy cerca del colegio San Juan de Dios que era donde nos tocaba votar. Aunque no se ve en la foto, detrás estaba mi madre; era su primer nieto y no lo perdía de vista. Además, en mi casa, siempre se cumplía con este tipo de obligaciones”.
Aunque tenían un “cochecito” último modelo, de esos de ruedas grandes y ballestas, debido al estado del empedrado del barrio Manoli y su madre decidieron llevar a Oscar en la “sillita”; desanclándola del resto del coche. Ella tuvo claro que a “su niño” no lo dejaba en el suelo y así se convirtió en todo un símbolo de la participación ciudadana. Nos preparábamos -todos- para una inminente democracia real con la que ya se empezaba a soñar.
Manoli ha crió tres hijos, Oscar, Sonia y Quique. Además de los quehaceres del hogar, ha desarrollado su vida profesional como Auxiliar en el Hospital Provincial de Toledo. Hoy, felizmente jubilada, no ha dudado en compartir un rato para hacernos partícipes de su experiencia como votante.
Gracias Manoli. Por querer recordar con nosotros ese momento tan personal.
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Quique J. Silva