Sucedió en Toledo. 17 D16 Archivo VASIL
En diciembre de 1968 el Ayuntamiento de Toledo pone en marcha el servicio de la Policía Motorizada. Sí, hasta entonces los municipales no contaron con un medio de locomoción tan ágil y rápido como las motos. Su pariente más cercano, en la vida toledana, lo podemos encontrar en aquellos “rondines” de la Fábrica de Armas que con su “escopeta de balines de sal” y sus bicicletas, se ocupaban de la vigilancia en el interior de la Fábrica y entorno del Poblado Obrero.
A la izquierda de la imagen, Juan Peñalosa toma buena nota de las características de los nuevos medios mecánicos que el Ayuntamiento utilizará para el cumplimiento de la Ley y el Orden en la ciudad. Ya entonces, estaba claro, por motivos estratégicos y tácticos, los motoristas irían en parejas.
Estos pioneros motorizados, perfectamente equipados para el frío invernal, pusieron las primeras piedras -o las primeras normas- para el actual desarrollo de la Policía Local y Agentes de Movilidad que también hoy, sobre sus motos, se ocupan de la Ley y el Orden. (Archivo VASIL: ver más entradas)
Quique J. Silva