Aquella belleza antigua [Jesús Fuentes Lázaro]

Felice Casorati, Conciertos, 1924. RAI. Dirección General, Turín.

Hace cien años, en octubre de 1917, se producía una revolución que trastocaría al mundo. En Rusia el gobierno de los zares era sustituido por la dictadura del proletariado. En el mismo año, esta vez en Nueva York, Marcel Duchamp entraba en un almacén de la Quinta Avenida. Tras vueltas y revueltas adquiría un urinario de porcelana de los que se colocan en la pared en los lugares públicos. Llegado a su estudio lo situó para que se viera que  estaba al revés. Firmó  la pieza como R. Mutt, puso fecha, 1917, y le adjudicó un titulo “Fuente”. Un objeto vulgar se convertía, por la voluntad de un hombre, en una obra para la Exposición de los Independientes – organizada por la Sociedad de Artistas Independientes –  en la edición del año 1917 en Nueva York. El mundo del arte quedaría definitivamente trastocado. Incluso, aún hoy, se debate sobre qué sea y qué no es arte. Cien años después, Duchamp es el nombre  más repetido tras el de Picasso cuando se habla de arquitectura, de pintura, de escultura o de arte en general. Continuar leyendo