Historias rusas [Jesús Fuentes Lázaro]

La Guía decía al grupo en aquel punto  de Moscú, al lado del rio Moscova, que en Rusia inveteradamente se construía una iglesia cada vez que se ganaba una guerra. Y así ocurrió con el edificio que los turistas  fotografiaban compulsivamente, pasando de las explicaciones de la guía,  entre un repicar de campanas que subliminalmente les unía a su país de origen. En realidad, el edificio no era exactamente el mismo, pero se le parecía tanto como una copia casi perfecta. La historia que la Guía contaba a los turistas, que apenas hacían caso, sería poco más o menos como la que sigue. Continuar leyendo